Las 6 mejores posturas para dormir en pareja
La forma en que alguien duerme puede decir mucho de él como persona. Sin embargo, ¿qué ocurre cuando se añade una segunda persona al colchón de tamaño individual?
A medida que nos adentramos en el sueño profundo, nuestro subconsciente toma el control. La forma en que nuestro cuerpo responde a nuestra pareja puede ayudarnos a comprender mejor nuestras relaciones.
Tanto si te gusta enredarte con tu pareja como si prefieres mantener tu espacio personal, tu postura preferida para dormir puede ayudar a calibrar el estado de tu relación más allá de lo que ocurre mientras estás consciente.
Aquí te contamos 15 posturas para dormir en pareja y lo que significan. También hemos encuestado a más de 1.000 personas para saber cuáles son las posturas preferidas cuando se comparte la cama con la pareja. Las cosas están a punto de ponerse personales.
Acurrucada
La postura clásica de la cuchara consiste en que uno de los miembros de la pareja adopta una postura íntima y protectora detrás del otro, mientras la segunda persona le apoya la espalda o el trasero. Es una postura de piel con piel que proporciona mucho confort emocional y físico.
Si te gusta esta postura, lo más probable es que estés empezando una nueva relación o que los dos no tengáis suficiente el uno del otro.
Cuchara grande
Como la cuchara grande, eres tú quien forma un abrazo protector detrás de tu pareja. Si prefieres ser la cuchara grande, lo más probable es que seas una pareja muy generosa y quieras consolar a tu pareja.
Cuchara pequeña
Como cuchara pequeña, te gusta sentirte seguro y protegido por tu pareja. En términos de su relación, es posible que también necesite un poco de cariño y cuidado extra.
Cuchara perseguidora
Se trata de una variación de la postura de la cuchara.
En lugar de acurrucarse los dos en el centro de la cama, la postura de “perseguir a la cuchara” consiste en que una persona se desplaza a un lado de la cama y su pareja la sigue o la “persigue”.
La pareja perseguida suele preferir dormir en posición fetal o de tronco, mientras que el “perseguidor” duerme en posición anhelante.
Esto puede significar dos cosas. O bien a la pareja perseguida le gusta hacerse la dura, o bien se está retirando y quiere más espacio de su “perseguidor”.
También puede ser una señal de que sus necesidades no están cubiertas. El “perseguidor” también podría estar queriendo más atención de su pareja.
Cuchara suelta
Mientras que las parejas que acaban de empezar una relación tienden a preferir el cuchareo, las parejas que llevan más tiempo saliendo a menudo no necesitan la novedad del contacto cuerpo a cuerpo constante.
“Para dormir mejor, los dos miembros de la pareja adoptan una postura más espaciada. Los dos lleváis juntos el tiempo suficiente para sentir un fuerte nivel de confianza sin necesitar la seguridad del contacto constante.
Si eres la cuchara grande, esta posición significa esencialmente que se puede contar contigo en cualquier momento, pero sabes que a ti y a tu cuchara pequeña os gusta la comodidad extra que supone daros un poco de espacio.
Espalda con espalda
Los que se duermen con contacto a lo largo de la columna muestran un equilibrio de cercanía e independencia. Si vuestras nalgas se tocan -también llamado “alunizaje”-, significa que ambos queréis manteneros sexualmente conectados sin dejar de sentiros cómodos mirando hacia otro lado. Si preferís esta postura, lo más probable es que estéis muy cómodos y relajados el uno con el otro.
También es posible que los dos hayáis discutido recientemente, pero vuestra disposición a tocaros significa que la relación sigue bien.
Frente a frente
Una ligera variación de estar completamente entrelazados, frente a frente tiene a ambos miembros de la pareja frente a frente, con las cabezas al mismo nivel. También pueden tocarse ligeramente, con los brazos cruzados. Esta posición íntima comunica que los dos individuos son afines y que hay un buen ambiente general en la relación.
Cuna de enamorados
En esta postura dulce y cariñosa, uno de los miembros de la pareja apoya la cabeza en el pecho del otro, con las piernas entrelazadas mientras se abrazan.
Una pareja que prefiere esta postura para dormir tiene un alto nivel de confianza y trabajo en equipo entre ellos. Esta posición acurrucada muestra protección y romanticismo y es la favorita de muchas parejas nuevas o que han reavivado su romance.
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